Los materiales de los que están hechos los equipos eléctricos son seguros y de fácil reposición para evitar cualquier tipo de falla o accidente y, en caso de que se produzca algún desperfecto, es posible resolverlo en el menor tiempo posible.
Pocos aspectos de la vida diaria requieren tanta atención y cuidado como la transmisión de energía por lo que su mantenimiento es fundamental.
¿Cuál es la importancia de revisar las instalaciones eléctricas?
Las instalaciones eléctricas tienen una vida útil de varios años (décadas en algunos casos) pero necesitan un plan de mantenimiento y un cuidado especial para reducir el riesgo de accidentes.
Todas las personas de la organización son propensas a sufrir accidentes con la electricidad por lo que es importante realizar mantenimiento preventivo de manera sistemática.
Si estos no se ejecutan bajo un estricto control profesional es posible que las instalaciones empiecen a fallar o que se estropeen algunos equipos de las organizaciones, por lo que más adelante se requerirá una corrección del sistema que sin duda será más costosa y difícil de realizar.
Además, una instalación eléctrica con problemas generará un aumento considerable en las facturas de los servicios aun cuando se disminuya el consumo de energía.
¿Cuáles son las alertas que indican la necesidad de un mantenimiento de las instalaciones eléctricas?
El mantenimiento debe realizarse al menos una vez al año y es importante dejar claro que todo trabajo sobre las instalaciones eléctricas debe ser llevado a cabo por profesionales.
El mantenimiento es el paso preventivo que se efectúa para tener siempre un servicio óptimo en las instalaciones y equipos eléctricos y consiste en evitar fallas o cortes en la distribución de la energía.
Estas son algunas de las alarmas que pueden indicar la necesidad de un mantenimiento en su organización:
- Los tomacorrientes tienen elementos extraños.
- Sentir pequeñas descargas eléctricas al contacto con ciertos elementos.
- El estado de los conductores usados en las instalaciones es precario. Tradicionalmente los conductores son de cobre o aluminio y no deben presentar cortos, enmendaduras ni desperfectos.
- El aislante de los conductores se ve deteriorado o descolorido.
- Hay disminuciones en la intensidad de la energía en la organización. Los bombillos bajan la potencia de su luz intempestivamente.
- Hay olor a quemado como si existiera un corto circuito.
¿Qué debe realizarse en un mantenimiento en instalaciones eléctricas?
Los profesionales que se encargan del mantenimiento preventivo de las instalaciones eléctricas tradicionalmente realizan estas operaciones:
- Revisar y cambiar, de ser el caso, los elementos que conducen la corriente eléctrica de las fuentes a las cargas.
- Ensayar los tomacorrientes de energía y verificar que estén en buenas condiciones y ofrezcan la electricidad esperada y medir su voltaje.
- Cotejar que los materiales elegidos para las instalaciones eléctricas sean los correctos.
- Comprobar que existan los contactos de protección para choques eléctricos para baja o alta tensión.
- Acreditar que los materiales se ajusten a lo prometido en el diseño.
- Verificar el estado de los envolventes de las partes en tensión y su necesario alejamiento.
- Probar el estado de los interruptores, fusibles y diferenciales del hogar. Que no exista pérdida de electricidad en ellos.
- El papel de la señalización
Además de la verificación de los expertos en el proceso de mantenimiento de las instalaciones eléctricas, la señalización de los lugares en los que hay relación con la electricidad es fundamental. Si se trata de un edificio es necesario que los profesionales revisen la señalización en las zonas comunes o en los lugares a los que tienen acceso los habitantes. Esta debe ser clara, actualizada y de fácil interpretación.
Todos los espacios de instalaciones eléctricas tienen por objeto su fácil accesibilidad para cumplir con su objetivo, por lo tanto, es clave que durante el mantenimiento también se revisen las señales que indiquen el oficio de cada espacio y sus riesgos.
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